La opción de un recorrido

Texto curatorial con motivo del proyecto 5X5Castelló2013, en el Espai d’art contemporani de Castelló-EACC y El Convent-Espai d’Art, Vila-real, del 25 de octubre de 2013 al 12 de enero de 2014.

El arte visual que se realiza en la actualidad absorbe contenidos desde muy diversos ámbitos socioculturales y los re-inscribe en los espacios destinados a su consumo con una doble voluntad: el empleo de técnicas y temáticas híbridas, que co-habitan con naturalidad y dotan al arte contemporáneo de una clara vocación cultural y social; y la aceptación de que cualquier novedad sea posible y vaya destinada a trascender el propio ámbito desde donde surge.

Sin pretender una lectura reduccionista de esta edición de 5×5 Castelló 2013-2014, los veinticinco artistas seleccionados son ejemplos apropiados de estas vertientes contemporáneas del arte visual que, parafraseando a Guy Debord, “se parecen más a su tiempo que a sus padres”. En la edición de este año se quiere establecer una relación temática entre las obras presentadas, sin pretender por ello delimitar el sentido interpretativo de cada proyecto u obra, dejando a la mirada y a la lectura del espectador la última palabra de aquello que se ve, se presiente y se analiza de manera individual, y proponiendo una opción de recorrido en la que deambular física y teóricamente.

La puesta en relación de estas obras plurales se ha organizado a partir de cuatro bloques temáticos. Cada uno de ellos acoge con flexibilidad un número determinado de piezas o acciones que pueden ser leídas desde esa perspectiva conceptual, en una suerte de disposición de “buena vecindad” entre ellas. La pertenencia a un bloque temático orienta su lectura, pero no determina su sentido. A su vez, los cuatro apartados generan un recorrido que vincula lo general y lo particular, desde el espejo orientado hacia el yo hasta la ventana abierta al mundo y a la otredad, y viceversa, como un camino de ida y vuelta. Estos bloques corresponden a los siguientes conceptos: Lugares, Narraciones, Distanciamientos y Cuestionamientos y, al tiempo, se han reducido a la palabra inicial de una frase que necesita ahora ser contextualizada. A modo de aclaración en su hábitat propio, una concisa introducción acompaña las obras agrupadas dentro de cada temática.

En esta edición de 5×5 Castelló se presenta asimismo la novedad de una segunda sede que acoge parte de las obras representadas. La sala de exposiciones El Convent Espai d’Art, en Vila-real, se une al Espai d’Art Contemporani de Castelló-EACC para ampliar el sentido de recorrido espacial que se completa con la visita de ambos emplazamientos y que inauguran sus partes del todo en dos momentos temporales distintos, aspecto que genera per se un juego de espacialidad y temporalidad característico de cualquier recorrido.

Lugares se presenta como posible inicio. Representa la naturaleza y las ciudades contemporáneas, el lugar de memoria y el espacio homologable que actúa asimismo como negación, como no lugar: el tránsito y lo inaprensible. Lo dado y lo manipulado nos lleva a la construcción de un mundo que necesita Narraciones para ser contado, cuando la representación de lo circundante y la creación de realidad a través del relato toma forma en el espacio re-contextualizado de exposición. La mirada en el espejo genera un reflejo, pero igualmente duplica la distancia; Distanciamientos es un conjunto de obras que reflexionan sobre la identidad, el ser y el parecer, convertidos en estudios de caso particulares. Y, derivado de esa primera toma de conciencia de la distancia, Cuestionamientos se pregunta sobre lo social y lo político; el modo en que hemos agrupado los intereses colectivos y los porqué en las deficiencias del sistema, en apariencia infalible.

La sugerencia de este orden se encuentra concentrado y resumido en la sede de Vila-real, donde la inauguración acontece seis días después y donde se encuentra una selección de ocho obras representativas de los cuatro grupos temáticos. La intención es generar un deambulatorio entre ambos espacios que resalte la complementariedad de la propuesta, a modo de dos piezas que encajan al ser puestas una junto a otra, a pesar de sus diferentes tamaños y de la diversidad de sus formas.

Lugares. La naturaleza y los hábitats; los lugares de tránsito globalizados; el lugar evocado dentro del espacio expositivo; el dispositivo de lo expuesto; la instalación como lugar que re-contextualiza. El recorrido empieza en el paisaje, convertido en territorio y hábitat urbano, transformado y, en ocasiones, sobre-explotado. Los lugares de tránsito, de paso, el no lugar como concepto icónico de un estilo de vida, frente al lugar identitario, sujeto a la historia y al tiempo, a los recuerdos y a su olvido. En el arte, el registro previo a la pérdida y la transformación construye memoria, rescata o ralentiza el devenir implacable de los hechos. Otras veces, simplemente muestra o recrea un devenir de dimensiones globales. El espacio de exposición deviene lugar de representación (y traducción a escala individualizada) de un afuera que existe en relación con lo común y lo colectivo.

Narraciones. La historia universal y las micro historias; las narraciones que explican el mundo; el universo y el estudio del artista; el relato de aquello que configura lo que somos colectivamente. Tras la constatación del entorno, inventamos los códigos que nos permiten entenderlo, explicarlo, recrearlo. De manera oral, escrita y a través de las imágenes, como en un proceso cada vez más complejo y sofisticado de comunicación, traspasamos la frontera entre lo externo y la comprensión propia a través de la cultura. La obra artística y el espacio expositivo devienen símbolo o alegoría de aquello que circula y pervive fuera de sus límites.

Distanciamientos. La identidad frente a un espejo que distancia lo que refleja; el género; la presencia física y la acción como complementos necesarios de la obra expandida; la multiplicidad del yo. El rostro reflejado en el agua es una narración mítica del principio de la consciencia personal que ha encontrado en el arte a un fiel aliado. La evolución de las cuestiones de género, de la identidad personal en relación a la establecido, la necesidad de vindicar la igualdad y exigir la visibilidad de lo minoritario… son demandas claramente relacionadas con el arte de las últimas décadas que ha encontrado en sus modos de exorcizar lo individual, un camino que recorrer conjuntamente.

Cuestionamientos. Analizar el mundo y sus reglas desde la distancia crítica; el sistema cuestionado; cualquier elemento personal y todos los elementos éticos; el debate entre el medio y el lenguaje; los meta-relatos. Mirar el mundo críticamente necesita implicación social y política. El arte contemporáneo ha ensanchado sus límites y desdibujado sus fronteras para dar cabida a planteamientos que, no estando vinculados necesaria ni complemente con el arte, pueden ser leídos y comprendidos en el contexto artístico más plenamente que en otros. Estas “estéticas de la emergencia” (Reinaldo Ladagga) actúan fuera de los límites del arte para, una vez empleados los recursos y ocupados los espacios canónicos del propio medio, volver a la arena socio-política. Vigilar a los vigilantes y cuestionar los límites entre representación y construcción de realidades.

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